Cuando la noche aparece limpia de nubes y/o con una ligera brisa, especialmente durante el periodo de cuarto menguante en el que La Luna no molesta en absoluto por ser visible durante el día, podemos contemplar en el firmamento chertoli raros fenómenos luminosos que acaparan sorprendentemente nuestra atención.
Pensando en tiempo cósmico, hace unos 12.000,000.000 años cuando en el Universo solo habían 600,000.000 estrellas, una de ellas varios cientos de veces mayor que nuestro Sol, no pudiendo soportar la energía que almacenaba, explotó. La inmensa cantidad de radiación liberada ha viajado por los confines del espacio sideral y la observación minuciosa nos permite poder distinguir un punto luminoso en la estrellada bóveda celeste.
Lo que acabó siendo un agujero negro, nos sirve para entender que las primeras estrellas nacieron de forma más rápida de lo que pensábamos porque solo tienen hidrógeno y no es el caso de ésta tan lejana que con la inmensa radiación gamma que liberó en los 10 segundos de su desaparición, superaba la de 100 soles durante toda su existencia.
Aunque se supone que cada día nacen más de 1.000 agujeros negros en galaxias que están entre los 2.000,000.000 a 5.000,000.000 de años luz de nosotros, en este caso hemos tenido la fortuna que en el momento de su estallido dos inmensos chorros de materia salieron en direcciones opuestas y uno tomó la de nuestro sistema solar.
3144- INQUIETUDES CABANENSES.
Hace 7 meses
2 comentarios:
Ahora entiendo porqué eres un iluminado! jeje
Y porque no estaba cerca... ¡Menuda socarrada de bigote!.
Salu2 y A10, Julián.
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